Evaluación del funcionamiento de columnas y equipos de destilación de la destilería de una empresa agroindustrial para elevar el grado alcohólico y la producción
Fecha
2025-05-20Autor
Cortez Guimarey, Ricardo Antonio
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En la destilería de la empresa agroindustrial Cartavio S.A.A. existen 03 plantas de
producción de alcohol las cuales actualmente producen un total aproximado de 120 mil
litros de alcohol por día. Cada una de estas plantas trabaja con melaza como materia prima
ya sea proveniente de la propia azucarera o de otros ingenios azucareros. Para el
desarrollo completo del proceso, cada planta opera con 5 columnas de destilación:
columna mostera, columna rectificadora, columna agotadora de flegmas, columna
desmetanizadora, columna hidroselectora y una columna de aldehídos. Uno de los
inconvenientes más recurrentes en esta destilería es que la planta #2 siempre ha sido una
de las más limitadas en producción debido a problemas de calidad en el producto
terminado. Como es de conocimiento, los días de operación en una destilería son
determinados por el nivel de incrustación en la columna mostera y el tiempo que demande
en su limpieza. Normalmente a los 20 días de operación, con un flujo de alimentación de
11 m3/h de vino era necesario realizar una parada de limpieza la cual demandaba entre 3
a 4 días. Además de ello, el grado alcohólico de su producción era muy inestable y
oscilaba entre 95.80° y 96.10° G. L. motivo por el cual se evitaba consumir mucho vino
con la finalidad de mantener la calidad del producto terminado. La importancia del
presente informe se basa en reflejar la capacidad de toma de decisiones frente a los
problemas que afectan directamente el rendimiento y a la eficiencia de la planta, asi como
la aplicación de los conocimientos académicos adquiridos durante la formación
profesional. En primera instancia, se realizó un seguimiento de los análisis de grado
alcohólico del producto terminado brindados por laboratorio de calidad para así
determinar la recurrencia con la que ocurría la desviación del análisis. Se pudo apreciar
que el grado alcohólico del alcohol rectificado de la planta #2 no se mantenía por encima
de los 96° G.L. por más de una hora, llegando a oscilar entre 94.30 y 96.05° G.L. Debido
a ello, para descartar que la causa original de la caída del grado alcohólico de la
producción sea la variación del vapor de 10 psi y 20 psi, se trabajó en conjunto con el
supervisor del área de calderos y con el ingeniero de procesos de turno en el área de
elaboración para mantener una tendencia optima en consumo de vapor hacia la destilería
y poder estabilizar nuestros parámetros de operación. Luego de un seguimiento de 24
horas con condiciones normales, pudimos descartar dicha hipótesis puesto que la
desviación en los análisis era persistente. Es por ello por lo que se inició una serie de
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muestreos a lo largo de los diferentes equipos de destilación: condensadores, pase de
columna rectificadora a columna desmetanizadora, fondos de cada columna de
destilación, entrada y salida de alcohol del reboiler, muestreo en succión y descarga de
cada bomba propia de cada columna de destilación y a la entrada y salida del enfriador
de alcohol. La finalidad de dichos análisis era determinar si existían valores fuera de rango
asumiendo así una posible contaminación por agua o por alguna flegma de alcohol. En
dicha prueba se identificó en el reboiler de la columna desmetanizadora una desviación
en el grado alcohólico de las dos muestras tomadas. Este equipo tiene como diseño
ingreso de vapores alcohólicos de 50° G.L. por fuera de los tubos y por dentro de los
tubos ingreso de alcohol rectificado de 96° G.L. cuando se realizó el muestro se observó
que la salida del alcohol de 96° llegaba a disminuir entre 84 y 90° G.L. mientras que el
condensado de los vapores alcohólicos de 50 G.L. aumentaba. Es por ello, que para
corroborar la teoría de una posible contaminación por algunos tubos rotos en el reboiler
se sacó una muestra del fondo de la columna desmetanizadora y efectivamente se
comprobó la existencia de alcohol de bajo grado en dicha columna. Como protocolo de
corrección, se coordinó con el ingeniero de mantenimiento el desmontaje del equipo para
realizar una prueba hidráulica. De esta forma se podría identificar cuáles y cuantos de los
tubos presentaban fugas. Finalmente, luego de identificar los tubos que presentaron fugas
en la prueba hidráulica se procedió con la corrección. Una vez culminado el izaje del
reboiler, se puso en servicio y mediante seguimiento se pudo corroborar la mejora y la
estabilidad en el grado alcohólico del producto terminado. Por otra parte, la mejora del
grado de dicha planta fue un punto clave para incrementar la producción puesto que era
imposible subir la alimentación de vino a la columna mostera por precaución de no
almacenar mucho producto terminado de baja calidad. Así mismo, al aumentar el ingreso
de vino a destilar se establecieron nuevos parámetros de operación para la columna
mostera y rectificadora para evitar que las columnas de inunden y se ahoguen,
respectivamente. At the distillery of the agro-industrial company Cartavio S.A.A., there are three alcohol
production plants, which currently produce an approximate total of 120,000 liters of
alcohol per day. Each of these plants operates with molasses as raw material, either
sourced from its own sugar mill or from other sugar mills. For the complete development
of the process, each plant operates with five distillation columns: mash column, rectifying
column, phlegm exhaust column, demethanizing column, hydroselective column, and an
aldehyde column. One of the most recurrent issues at this distillery is that Plant #2 has
always been one of the most limited in production due to quality problems with the
finished product. As is commonly known, the operating days in a distillery are determined
by the level of fouling in the mash column and the time required for its cleaning.
Typically, after 20 days of operation with a feed flow of 11 m3/h of wine, a cleaning stop
would be necessary, which required between 3 to 4 days. In addition, the alcohol content
of the production was highly unstable, fluctuating between 95.80° and 96.10° G.L., which
led to a reduction in the consumption of wine to maintain the quality of the finished
product. The importance of this report lies in reflecting the ability to make decisions in
the face of problems that directly affect plant performance and efficiency, as well as the
application of academic knowledge acquired during professional training. Initially, an
analysis was conducted on the alcohol content of the finished product, provided by the
quality laboratory, to determine the recurrence of deviations in the analysis. It was
observed that the alcohol content of the rectified alcohol from Plant #2 could not be
maintained above 96° G.L. for more than an hour, fluctuating between 94.30° and 96.05°
G.L. Due to this, to rule out the possibility that the drop in alcohol content was caused by
variations in vapor pressure (10 psi and 20 psi), the team worked alongside the boiler area
supervisor and the process engineer on duty in the production area to maintain an optimal
steam consumption trend to stabilize operational parameters in the distillery. After a 24-
hour follow-up under normal conditions, this hypothesis was discarded, as the deviation
in the analysis remained persistent. Therefore, a series of samples were taken from various
distillation equipment: condensers, the transition from the rectifying column to the
demethanizing column, the bottoms of each distillation column, the inlet and outlet of
alcohol from the reboiler, and the suction and discharge of each pump in each distillation
column, as well as the alcohol cooler’s inlet and outlet. The purpose of these analyses was
to determine whether there were any out-of-range values, suggesting possible
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contamination by water or by alcohol phlegm. In this test, a deviation in the alcohol
content of two samples taken from the reboiler of the demethanizing column was
identified. This equipment is designed to allow the entry of alcoholic vapors at 50° G.L.
outside the tubes, while rectified alcohol at 96° G.L. enters through the tubes. Upon
sampling, it was observed that the output of the 96° alcohol decreased to between 84° and
90° G.L., while the condensed 50° G.L. alcoholic vapors increased. To corroborate the
theory of possible contamination due to broken tubes in the reboiler, a sample was taken
from the bottom of the demethanizing column, and it was confirmed that low-grade
alcohol was present in the column. As a corrective protocol, coordination was made with
the maintenance engineer to dismantle the equipment for a hydraulic test, which would
help identify which and how many of the tubes were leaking. After identifying the tubes
with leaks during the hydraulic test, corrective action was taken. Once the reboiler was
reinstalled, it was put back into service, and follow-up checks confirmed the improvement
and stability in the alcohol content of the finished product. Moreover, the improvement
in the alcohol content of this plant was a key factor in increasing production, as it had
been impossible to increase the wine feed to the mash column out of concern for storing
too much low-quality finished product. Likewise, with the increased wine feed for
distillation, new operational parameters were established for the mash and rectifying
columns to prevent flooding and choking of the columns, respectively.
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- Ingeniería Química [25]







