Modelo de neuropotenciadores para fortalecer la transferencia de la información de textos continuos a la memoria de largo plazo I.E. Juan Manuel Iturregui – Lambayeque, 2018
Resumen
Una enseñanza y un aprendizaje estratégico es lo que se debe aspirar en las aulas,
una transferencia efectiva a la memoria de largo plazo que permita que la información
registrada sea localizada, rápidamente, cuando sea evocada, ante una situación de
examen o frente a una decisión importante que tomar. No obstante, la información
parece diluirse en las aulas de Educación Básica Regular, pues los estudiantes de quinto
grado no recuerdan contenidos claves que han sido tratados junto a los educadores y sus
compañeros. Para corroborar este problema, se aplicó dos instrumentos a 141
estudiantes de 5° de secundaria de educación básica regular que permitió identificar en
los estudiantes el nivel de transferencia de información de textos continuos a la
memoria de largo plazo y reconocer las estrategias emocionales, de ensayo,
organización, elaboración y las metacognitivas que utilizan los estudiantes en el proceso
lector. Los principales resultados arrojaron que los estudiantes tienen una mala
transferencia de información a la memoria de largo plazo; es decir, recuerdan muy poco
las ideas ejes de lo desarrollado en una sesión anterior de lectura de textos continuos; se
suma a ello, que los estudiantes tienen un regular uso de estrategias, las pocas utilizadas
son muy rutinarias. En tal sentido, se diseñó un modelo de neuropotenciadores para
fortalecer en los estudiantes de quinto año la transferencia de la información de textos
continuos a la memoria de largo plazo. Esta investigación descriptiva – propositiva tiene
un modelo que está estructurado en seis módulos: el primero sirve de marco orientador
para el docente aplicador y los cinco restantes es la propuesta propiamente dicha. Se
debe resaltar que este modelo tiene en cuenta la neuroeducación, donde la emoción, la
atención y otras estrategias afectivas o emocionales se constituyen en elementos
significativos y motores para el aprendizaje. En suma, con la aplicación de este modelo,
el proceso lector será más sistemático, estratégico, más ameno y, por supuesto, la
información procesada se anclará mejor en la memoria de largo plazo.