Diseño de un taller de juegos para elevar la autoestima en los niños y niñas de 05 años del nivel de educación inicial, Institución Educativa “Niño Dios”, Chimbote, año 2018.

Abstract

La autoestima no es un factor hereditario. Si bien podemos estar condicionados por naturaleza a tener un positivo o negativo concepto de nosotros mismos, la autoestima es algo que se genera en las edades tempranas y que influirá en el resto de nuestras vidas. El entorno familiar se convierte así en el primer gran escenario en el que actuar; a través del cariño, el refuerzo positivo o el reconocimiento de los logros los niños van formando su autoestima. Por otro lado, la escuela -donde además de educación se establecen habilidades para relacionarse- es otro pilar importante en este sentido. (https://www.hola.com/estar- bien/20180914129481/juegos-ninos-autoestima-gt/)

Cuando se tiene una autoestima baja, las reacciones habituales son apatía, desinterés e incluso violencia o comportamientos negativos (que buscan el castigo pues así se tiene atención por parte de los padres). Los problemas en el colegio, la incapacidad de relacionarse de una manera saludable, un mal concepto de uno mismo… todos estos efectos visibles durante la infancia y la adolescencia podría desencadenar en adultos depresivos e incapaces de enfrentarse a las embestidas y los retos que la vida le pondrá delante. ÍDEM.

Para ayudarles, se realizó nuestro trabajo de investigación, con el objetivo de elaborar un Taller de Juegos para elevar el nivel de autoestima en los niños y niñas de 05 años del nivel de Educación Inicial pertenecientes a la I.E. “Niño Dios”, Chimbote.

Aplicamos una lista de cotejo, entrevistas y recojo de testimonios sobre la autoestima en los niños y niñas de 05 años del nivel de Educación Inicial pertenecientes a la I.E “Niño Dios”, Chimbote. Luego de haber aplicado estos instrumentos se determinó que la autoestima presenta múltiples debilidades y limitaciones. Los resultados muestran estas deficiencias a través de la poca socialización entre niños, sentimientos de inferioridad, limitada alegría, molestias frecuentes, tendencia a asustarse por cualquier cosa, miedo para formular preguntas. Estos problemas se presentan con mayor frecuencia en los niños en comparación con las niñas y en la sección “B” en relación con la sección “A”.

Concluimos como logros de la investigación, por un lado, el haber justificado el problema; y por el otro, haber elaborado la propuesta.